Fuente: Google / 16.11.2010
El 10% de personas de la tercera edad sufriría de hipotiroidismo
Las alteraciones en nuestro metabolismo, o la manera cómo el cuerpo obtiene energía de los alimentos que ingerimos, son causadas por las enfermedades tiroideas, la más común de las cuales es el hipotiroidismo, que con mayor frecuencia afecta a las personas de la tercera edad, sobre todo mujeres.
Hablamos de hipotiroidismo cuando el organismo no produce suficiente hormona tiroidea, lo que hace más lento el metabolismo y provoca trastornos sistémicos que se manifiestan con aumento de peso por retención de líquidos (aunque se coma moderadamente y se haga ejercicios), cansancio y fatiga, dificultad para soportar bajas temperaturas, alteraciones en la piel (edemas), anemia, reflejos retardados, estreñimiento severo, depresión, dolor articular y caída de cabello.
Estos síntomas pueden variar de una persona a otra y confundirse con los de otras condiciones como el embarazo, la menopausia o la depresión, por lo que es recomendable para un correcto diagnóstico del hipotiroidismo realizarse el examen de sangre denominada prueba de la TSH (hormona estimulante de la tiroides). Se estima que esta enfermedad puede afectar hasta a un 10% de adultos mayores. En casos severos el hipotiroidismo puede producir trastornos de la función cardíaca, digestiva y respiratoria, e incluso conducir a situaciones extremas como el “coma mixedematoso” que se caracteriza por un estado de inconsciencia, hipotermia y severa alteración respiratoria.
La glándula tiroides produce y almacena las hormonas tiroideas y las libera a la sangre, regulando así el metabolismo corporal. Tiene forma de mariposa y se ubica en el cuello, sobre la tráquea. Con frecuencia es sencillo detectar su alteración, debido a que se percibe a simple vista la hinchazón de nódulos alrededor de la manzana de Adán.
Aumento de casos:
Se advierte un aumento en las enfermedades tiroideas, ya que se diagnostica un mayor número de casos, lo cual, sin embargo, no significaría necesariamente el aumento en la presencia de esta enfermedad sino que cada vez más personas saben que deben tratarse por alguna afección tiroidea y acuden al servicio médico. Este aumento se da en ciertos pacientes como adultos mayores consultantes de enfermedades psiquiátricas, en diabéticos tipo 1 (insulino-dependientes) o en portadores de males reumatológicas autoinmunes como lupus eritematoso y artritis reumatoidea.
Se estima que diez de cada cien personas de la tercera edad podrían sufrir de problemas de la glándula tiroides y muchas de ellas no lo saben debido a que esta disfunción puede ser asintomática o los síntomas pueden confundirse con el de otras patologías, por lo que se recomienda un examen profundo de cada caso y realizarse la prueba clínica denominada TSH a fin de detectar o descartar esta anomalía.
Para descartar correctamente el hipotiroidismo el especialista, además de tomar en cuenta los síntomas descritos, debe conocer la historia médica y familiar del paciente, realizar el examen físico de la tiroides para detectar cambios tales como resequedad de la piel, inflamación, reflejos lentos y latido cardíaco más lento. Asimismo debe recurrir a la prueba de la TSH (hormona estimulante de la tiroides), que es la más importante y sensible para el hipotiroidismo y mide la cantidad de tiroxina (T4) que se le pide producir a la tiroides. Una TSH anormalmente alta significa hipotiroidismo.
El hipotiroidismo no se puede curar, pero en casi todos los pacientes se puede controlar por completo, reemplazando la cantidad de hormona tiroidea que el organismo ya no puede producir. La respuesta a esta medicación generalmente es buena y dentro de semanas o meses se observa una notoria mejoría de los síntomas del hipotiroidismo
Otra enfermedad tiroidea frecuente es el hipertiroidismo, que es cuando la tiroides es demasiado activa y produce más hormona tiroidea que aquella que el cuerpo necesita, de modo que el exceso de hormona tiroidea puede provocar en una persona baja de peso, aumento de la frecuencia cardiaca, nerviosismo, temblor en extremidades y que sea muy sensible al calor.
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